Poor Things

Cuando nacemos, nuestra mente se encuentra en blanco (de acuerdo a los expertos que concuerdan en que somos una tabula rasa), y sólo tenemos reacciones fisiológicas y corporales a los estímulos externos e internos, llamados reflejos e instintos. Con el pasar del tiempo, nuestra experiencia nos va dando la pauta para conocer el mundo, para saber qué es bueno para nosotros y qué es malo; qué es bueno para la sociedad y qué es malo; qué nos hace felices, qué nos hace tristes, qué nos hace sentir diferentes cosas que nos van haciendo ser lo que somos. En nuestra unicidad y en nuestra forma de sociedad.

Pero, ¿qué pasaría si todo eso que aprendimos en todos esos años se nos olvidara y tuviéramos que volver a aprender? Seguro muchos pensarán en aquellas personas que, debido a un accidente o a alguna enfermedad, pierden la capacidad de recordar o pierden la memoria, y claro que se incluye en la respuesta a la pregunta, pero, ¿y si nos vamos más lejos? ¿Si el cerebro de un recién nacido fuera implantado en un adulto? Esto es lo que nos cuenta «Poor Things».

SINOPSIS

El doctor Godwin Baxter está buscando una oportunidad para poner en práctica lo que ha creado en la teoría, hasta que encuentra el cuerpo de una mujer que se ha suicidado. Cuando ve que en su vientre lleva un bebé, decide trasplantar el cerebro del bebé a la de su madre. Así, ella, ahora siendo Bella Baxter, comienza un recorrido de aprendizaje propio y de todo el mundo en el que vive. Godwin le pide a uno de sus alumnos, Max McCandless, que registre el cambio que se va produciendo en Bella, pero se enamora de ella y decide casarse con ella. Pero antes de eso, Bella decide irse de viaje con Duncan Wedderburn, un abogado que pretende aprovecharse de su inocencia, pero que termina siendo todo lo contrario.

La película es un enorme tour de force, no sólo en lo que a actuación se refiere, sino al viaje por el que transita y todas las cosas por las que debe pasar para crecer. Bien podría considerarse una road movie, pero por el estilo y por la trama, este subgénero queda desdibujado. Y es que son tantas las cosas que se pretenden tocar en poco menos de 150 minutos, que no hay momentos de descanso entre una lección y otra, porque son lecciones, cosas que nos hacen reflexionar sobre la situación del personaje y sobre el momento histórico que vivimos como sociedad.

Primero, la ficción lega de repente cuando la operación de intercambiar los cerebros llega a su culmen y logran revivir a la que se convertiría en Bella. Para nuestra época, este tipo de experimentos parecería irreales, pero ciertamente ya se han hecho a finales del siglo XIX y principios del XX, sin olvidar que su punto más alto fue durante las Guerras Mundiales. Por eso la novela de «Frankenstein» fue tan aceptada, por lo mismo que sucede ahora, parece ficción, pero bien podría ser real. Y tampoco olvidemos que «Poor Things» es una versión renovada del clásico, llevada a una visión feminista y empírica.

Ahora bien, teniendo en cuenta este origen, ya no sorprende ver que toda la película se centra en Bella, en su experiencia, en su crecimiento, en sus nuevas ideas acerca del mundo. Por eso, el primer momento en que se nota que algo ha cambiado en ella, es cuando decide salir, y esa primera salida al bosque estimula los nuevos deseos. Bella ha dejado de ser una niña para convertirse en una adolescente (seguimos viendo la división mental y corporal, pues aunque sólo ha pasado un año, la estimulación es rápida). Por ello, la decisión de irse con Duncan es totalmente entendible. Y aquí, nuestra percepción de las edades caería en una primera cuestión social, ¿la relación es socialmente aceptable porque el cuerpo de Bella ya es adulto, o sería un crimen pues la mente es muchísimo menor?

Para efectos de la película y de las nuevas perspectivas feministas en la actualidad, la pregunta anterior no tendría cabida pues, siendo mujer, ella decidiría lo que quiere y lo que es mejor para ella, aún sin tener un discernimiento completo sobre el bien y el mal, sobre lo correcto o incorrecto, sobre lo moral e inmoral, etc. Bella ha decidido irse con él y lo que haga con él es sólo por ella misma. Y es aquí donde comienza la exploración más personal que le ocurre a Bella, donde el monstruo de Frankenstein deja de ser monstruo para convertirse en parte de la sociedad. Pero, al seguir siendo un monstruo, sus actos y sus pensamientos siguen estando fuera de lo normal de los demás. Es por esto que cada vez que decide hacer algo o decir algo, pone en predicamento a Duncan. él trata de aprovecharse de ella con el sexo, pero no se da cuenta que ella es quien lleva las riendas por ser la que está experimentando todo.

Esta experimentación la lleva hasta tal punto en que el utilitarismo llega a tal punto que al personaje de Duncan le cae mal, le disgusta, lo rompe. Aunque la introducción de la visión política con el socialismo siento que está fuera de lugar (pudo usarse algo más, a pesar de que su importancia es grande para continuar con la libertad de Bella, no siento que haya sido bien usado). La libertad se vuelve fundamental y con ella la visión muy propia de Bella. Esa libertad incomoda a todos (excepto a Godwin y Max, pues ellos saben la verdad y entienden lo que sucede), tanto que su actitud luce asincrónica.

La película es una fenomenal visión de libertad sobre la mujer, y aunque sepamos que se trata de un experimento desde el inicio, también sabemos que esa inocencia forma parte de nosotros, que nosotros damos ese valor a las demás personas sin importar edad o situación mental, pero que también hacemos que nuestra percepción o juicio sobre otras personas no es tan inocente a pesar de que el valor de sus actitudes no proviene de ellas. La visión actual resalta el hecho de dejar a nuestro prójimo hacer lo que desee, que comporte como quiera y que experimente lo que sea porque su cuerpo es de aquella persona y nosotros no tenemos opinión sobre ellos (enfatizando el límite que hay entre acciones sobre ellos y acciones sobre terceros). El problema ocurre cuando ese tercero tiene opiniones o sueños o expectativas sobre aquella persona.

Aunque la libertad y el feminismo son los temas centrales, también el punto de vista desde afuera es importante, aceptar a todos como son porque las circunstancias de su vida son ajenas a nosotros, como la vida que tuvo el doctor Godwin o la vida anterior que tuvo Bella para suicidarse.

Quizá la pelea con «Oppenheimer» fue muy clara en cuanto a premiaciones, beneficiando a la creada por Nolan, pero no hay duda de que «Poor Things» también es una obra maestra por completo. Hay algunos detalles que se dejan al aire o que utilizan un deus ex machina para evitar momentos que no sumaban mucho, pero en general, la película es extraordinaria. Con su estética steam-punk, con un vestuario fantástico, con un soundtrack que crea el ambiente perfecto, y con escenas que crean debate (en todos sentidos). Las actuaciones son fenomenales y está claro que hemos visto uno de los mejores papeles de Emma Stone en su vida y en la historia del cine.

PÓSTER ALTERNATIVO

FICHA TÉCNICA

Título Original: Poor Things
Estreno: 1 de Septiembre del 2023 [Venice]. 8 de Diciembre del 2023 [Estados Unidos]. 12 de Enero del 2024 [Reino Unido]. 18 de Enero del 2024 [México]. 26 de Enero del 2024 [España].
Reparto: Emma Stone. Mark Ruffalo. Willem Dafoe. Ramy Youssef. Christopher Abbott. Suzy Bemba. Jerrod Carmichael. Kathryn Hunter. Vicki Pepperdine. Margaret Qualley.
Director: Yorgos Lanthimos
Género: Comedia. Drama. Romance.

Basada En: «Poor Things: Episodes From The Early Life Of Archibald McCandless M.D., Scotish Public Health Officer» de Alasdair Gray [1992]

TRÁILER