Los Premios

Conocemos el trabajo de Julio Cortázar sobre todo por sus relatos, por una gran cantidad de cuentos que publicó en su vida, siendo varios de ellos grandes referentes del Boom Latinoamericano y del Realismo Mágico de mediados del Siglo XX, inspirándose de otros autores e inspirando a varios más a seguir esa misma línea literaria. También es sumamente conocida su irreverente obra «Rayuela», siendo que escribió menos trabajos en ese formato, pero con enormes resultados. Es justo en este género donde se presentan la presente obra.

«Los Premios» es su primera novela publicada, aunque no así la primera escrita. Ya antes había escrito dos novelas que se publicarían póstumas, mientras que ya se habían publicado tres libros antológicos. Siendo su primera novela oficial, se nota la forma en que su narración está impregnada de las obras que se encuentran a su alrededor, es decir, de las antologías publicadas antes y después de éste. Así, asistimos a un relato extenso (en varias formas) para averiguar qué sucede en sus páginas.

SINOPSIS

Tras ganar un concurso de la Lotería, un grupo de personas es reunida en un restaurante a unos minutos del muelle del que zarparán para un viaje en un crucero. Los ganadores han elegido a sus acompañantes, aunque lo han hecho conforme a la ética y no a su gusto, como es el caso del niño Jorge que debió llevar a toda su familia. Profesores, alumnos, un hombre de negocios ya anciano, una pareja de amigos con una relación complicada, y algunos más que se embarcan en una historia llena de misterio cotidiano. Todos ellos intentan saber porqué no los dejan ir a popa, por lo que se crean grupos de ataque para saber la verdad.

La novela es la primera en publicarse, no así su primera escrita, y menos de toda su obra, pues con el antecedente de los cuentos ya publicados, tenemos una gran base sobre la cual poder entender la escritura, la temática y los temas que trata en cada texto, en específico, el presente. «Los Premios» comienza siendo una novela sencilla, en la que un grupo variopinto de personas ha ganado una lotería y el pase para abordar un crucero. Ahora bien, desde esta primera situación, Cortázar nos hace reflexionar sobre esta curiosa forma de encontrase. Creemos que cada uno de ellos es similar al otro por haber tenido una característica que los une (ganar el premio), pero hay muchas más personas que ellos, y eso lo vuelve más grande, todo se multiplica, no sólo las personas, sino las interacciones, los problemas y las relaciones. Es un microcosmos, como bien lo vimos en «La Autopista Del Sur», con el similar tema de un viaje que se sitúa dentro de un espacio.

Dentro de estas nuevas y mayores relaciones interpersonales, hay algunos que permanecen aislados de los demás, o al menos tomando una distancia, sabiendo que sus contactos no merecen ser mucho más que los necesarios. Esto se ve muy claro en el Primer Día, donde la mayoría aún está superando el hecho de tener que compartir el viaje con más personas de las que se supone habrían ganado (y mucho más teniendo en cuenta que un sólo ganador invitó a toda su familia). Desde ese Primer Día, las relaciones también empiezan a ser más fuertes entre algunos debido a algo que concierne a todos: la prohibición de no poder ir a popa. Esto se troca en dos subtemas de la novela, la propia relación entre las personas y la búsqueda de la verdad por parte de los pasajeros. Algunos aceptan la historia de que se trata de un cerco sanitario, pero otros no.

Lo curioso, lo interesante, lo poderoso, es que Cortázar nos explica al final, en una Nota, que la historia no tiene un fondo político ni mágico, sino que todo lo que sucede es tal y como se cuenta. Esto le otorga una carga muy particular a la historia porque, teniendo en cuenta lo mencionado, seguimos pensando que la historia tiene algo de metáfora, de búsqueda que va más allá de saber la verdad de una enfermedad o de un cargamento secreto o algo más.
Esto se une a muchas cosas más que nos vamos preguntando y que obviamos desde un inicio, pero que después nos golpean con fuerza: son premios, pero, ¿a qué concurso? ¿Literario, de dibujo, de un esfuerzo físico, de acertijos, de colección? Porque la diversidad de personajes nos hace pensar que no todos son iguales en un aspecto. Además, un premio es algo que nos hace feliz, un regalo, pero este premio se vuelve un castigo, un juego que se convierte en algo retorcido. Junto a ello, nos preguntamos, ¿qué sucedió al final? ¿Porqué la popa estaba vacía? ¿Por qué todo el juego por parte de la Magenta Star?

Si bien es verdad que la trama, superficialmente, es sencilla, mientras se va deshilvanando la trama se van encontrando aspectos más interesantes, profundos y críticos. Aun siendo contrario a lo que nos dijo el autor al final, así se muestra. La división de los personajes en el grupo de los conformistas y el grupo de los reaccionarios, aquellos que deciden ir por todo a la popa, no sólo para mandar el mensaje, sino para saber, de una vez por todas, qué hay allá. Tal y como sucedió con la mujer de Lot que por curiosidad volteó y se convirtió en piedra. Aquí, la muerte llega a un personaje, ¿por castigo, coincidencia, destino?

No hay duda en que la extensión es demasiada para una narración que podía contarse con mucho menos hojas, hay varias situaciones que, fiel al estilo del autor, son altamente descriptivas con un lenguaje estudioso, si bien a muchos nos parecerá rebuscado, para Cortázar no es así, debido a su gran educación desde niño. Pero sí se ha dejado llevar en esta novela, con una gran extensión, con personajes que se olvidan en algunos momentos y otros que retoman fuerza para tener un cambio completo al final de la obra.

Novela interesante y muy clara en su objetivo, pero poco afortunada tras el paso del tiempo, tras el enorme mejoramiento de calidad que tuvo Cortázar en los años posteriores y por algunos detalles de la obra ya mencionados. De lectura lenta para absorber los mensajes, modismos, anglicismos y de otros idiomas, cambios en personajes y soliloquios.

FICHA TÉCNICA

Título Original: Los Premios

Autor: Julio Cortázar

Año: 1960

ISBN: 84-663-1304-4

Páginas: 448

FRASES

• ¿No le parece, Claudia, como si al emprender una actividad cualquiera renunciáramos a algo de lo que somos para integrarnos en una máquina casi siempre desconocida, un ciempiés en el que seremos apenas un anillo y un par de pedos, en el sentido locomotor del término?

•  Los libros van siendo el único lugar de la casa donde todavía se puede estar tranquilo.

• Todo poeta es por definición enemigo de la literatura.

⭐ (8/10)